BRASIL – El Gobierno y el Congreso intentan legalizar el juego

Las apuestas deportivas generan unos US$ 362 millones por año sin contribución alguna al Estado

El medio local UOL Economia ha publicado un artículo que afirma que existe consenso entre algunos miembros del gobierno federal y los legisladores para darle un verdadero impulso que permita la aprobación de una legislación que permita que los casinos, el jogo do bicho -la popular e ilegal lotería callejera – y los bingos, operen bajo regulaciones modernas después de unos 80 años de fracasadas leyes de prohibición.

Al proponer legislación para los juegos de azar, en lo que se considera la séptima economía más grande del mundo, los legisladores también pretenden incluir reglamentos más claros para los juegos electrónicos, el póker y otros.

Sin embargo, mientras los legisladores avanzaban con tales planes en Brasilia la semana pasada, el presidente Jair Bolsonaro dijo en una entrevista que usaría el veto presidencial contra cualquier nueva legislación de juegos de azar que sea aprobada por el Congreso. Según comentarios locales, la declaración de Bolsonaro está designada para sofocar los desvaríos de su base política de los evangelistas que se oponen a los juegos de azar en un momento en el cual no puede perder ningún apoyo político en absoluto a medida que crece la furia contra este presidente en todo el país por su desastrosa estrategia contra el Covid, que ha visto más de 600,000 muertos en Brasil.

Entre los políticos que favorecen los casinos en Brasil hay algunos partidarios de Bolsonaro, incluido su hijo que es senador, y lo que es más importante, el presidente de la Cámara de Representantes, Arthur Lira, quien ha creado un grupo de trabajo para actualizar una propuesta de marco regulatorio para legalizar los casinos de juego. El presidente de la Comisión de Turismo, el representante João Carlos Bacelar, ha dicho que tal propuesta debe publicarse en noviembre de 2021.

Aunque los partidarios del gobierno favorecen que los casinos sean parte de complejos integrados de turismo – Integrated Resorts – con la autorización de un número fijo de casinos por cada estado de acuerdo con el tamaño de su población, el representante Barcelar favorece un paquete legislativo integral para autorizar casinos, bingos, jogo do bicho y otras formas de juego, incluidos los casinos en línea y las apuestas deportivas. El representante Bacelar agrega que el jogo do bicho también debe ser legalizado, ya que está permitido en todas partes y no aporta nada a la economía.

Por su parte, Magno de Souza, presidente del Legal Gaming Institute, una ONG que aboga por la creación de un marco regulatorio para los juegos de azar, ha dicho: «La única forma de legalizar el juego es permitir que los operadores actuales se registren dentro del marco una actividad regulada. De lo contrario, el bicheiro seguirá ofreciendo juegos (ilegalmente) en el mercado paralelo».

Apuestas deportivas
En 2018, las apuestas deportivas se aprobaron como la modalidad de apuestas con cotización fija o cuotas fijas, en eventos deportivos. A pesar de la legalización, esta modalidad de apuestas sigue sin estar regulada, y esto significa que los sitios de apuestas han estado operando legalmente en Brasil durante casi tres años sin inspección ni recaudación de impuestos. El gobierno estima que la actividad genera alrededor de R$ 2 mil millones (US$ 362 millones) por año en el país.

Magno de Souza añade que existen más de 400 sitios de apuestas deportivas en el mundo a los que pueden acceder los brasileños, y que todos también ofrecen juegos en línea como máquinas tragamonedas y póker. Muchos patrocinan equipos de fútbol de la Primera y Segunda División de Brasil.

La ley dice que el gobierno federal tiene hasta diciembre de 2022 para habilitar la regulación de las apuestas deportivas, pero no define ninguna consecuencia punitiva si hay un retraso. Las apuestas deportivas en Brasil deben ser un servicio público del país y de los Estados y estos pueden delegar la operación de estas actividades a los operadores privados.