MEXICO – Gobierno exhorta a permisionarios contra irregularidades

Segob amenaza a la industria cuando el Ejecutivo no muestra indicios de equidad

En un comunicado de fecha 06 de mayo, la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dirigido “A Todos los permisionarios, y en general, a todas las personas interesadas en las actividades reguladas por la Ley Federal de Juegos y Sorteos y su reglamento”, a conducirse de conformidad con las leyes pertinentes para no excederse en soporte financiero a los candidatos en los próximos comicios electorales.

El próximo Proceso Electoral en México es para renovar la Cámara de Diputados y diversos cargos en los 32 estados del país, y se realizará el 6 de junio de 2021, convirtiéndose en la elección más grande en la historia de México.

El comunicado de la Segob dice, “nuestro país se encuentra en proceso de presenciar los comicios más grandes y complejos de la historia, se exhorta a todos los participantes que puedan tener injerencia en las elecciones, a conducirse de conformidad con la normatividad en materia electoral, con especial atención a los previsto en Capítulo II intitulado ‘Del Financiamiento Privado‘, regulado por la Ley de Partidos políticos”.

El comunicado de la Segob se dirige a una fracción ínfima del comercio mexicano, cuando existen denuncias contra candidatos y políticos avalados por el presidente de mexicano Andrés Manuel López Obrador, con crímenes contra las mujeres que no muestran solución alguna por la Segob o AMLO, quien no muestra indicios de equidad. Y es este caldeado ambiente en el cual la señora Sánchez Cordero exhorta a la industria del juego a portarse bien con sus donaciones para uno u otro candidato.

Un comentario al diario La Jornada pone en claro como se ven las elecciones en México, sin que se atribuya nada al sector del juego: “Desde siempre, el robo de urnas, el cambio de actas, los tacos de votos y otras barbaridades, tenían por objeto el lograr más diputados de los que con las votaciones de ciudadanos, efectivos, correspondían al PRI.

“Ese es el fraude electoral que se ha confundido, por intereses, con la compra y coacción del voto que, «haiga sido como haiga sido», el ciudadano de carne y hueso deposita su voto.

“Por eso es que la sobrerrepresentación, mediante la maniobra del 2018, de registro de candidatos de un partido, con cargo a otro, aunque sea de la misma coalición, tiene por resultado más diputados que los correspondientes a su votación”.